Adaptación total al espacio: Se puede diseñar la piscina para que se ajuste perfectamente a las dimensiones, forma y características específicas de tu terreno y jardín.
Libertad de diseño: Puedes elegir la forma (rectangular, redonda, con formas irregulares), la profundidad (con diferentes niveles), los acabados (gresite, liner, poliéster, etc.), y los elementos adicionales (escaleras de obra, playas integradas, jacuzzis incorporados, etc.) según tus gustos y necesidades.
Integración paisajística: La piscina puede diseñarse para complementar y realzar la estética de tu hogar y jardín, creando un espacio exterior único y armonioso.

Estructura sólida y robusta: El hormigón armado es un material muy resistente y duradero, capaz de soportar las condiciones climáticas adversas y el paso del tiempo sin deformaciones ni deterioros significativos.
Mayor vida útil: Una piscina de obra bien construida puede durar décadas, ofreciendo un valor a largo plazo para tu propiedad.
Menor riesgo de fugas: Una estructura de hormigón bien impermeabilizada es menos propensa a sufrir fugas en comparación con las uniones de los paneles de una piscina prefabricada o los materiales de una piscina desmontable.

Inversión a largo plazo: Una piscina de obra se considera una mejora permanente y de alto valor para la propiedad, lo que puede aumentar significativamente su precio de venta o alquiler.
Percepción de calidad: Las piscinas de obra suelen percibirse como de mayor calidad y más lujosas que otras opciones.

Características únicas: Puedes integrar elementos como iluminación personalizada, sistemas de hidromasaje, cascadas, toboganes, zonas de relax, etc., que serían más difíciles o imposibles de añadir a una piscina prefabricada.
Adaptación a necesidades específicas: Si tienes necesidades especiales de accesibilidad o de uso (por ejemplo, para rehabilitación), una piscina de obra se puede diseñar para satisfacerlas.

Reparaciones más sencillas: En caso de daños, las reparaciones en una estructura de hormigón suelen ser más sencillas y duraderas que en otros tipos de piscinas.
Posibilidad de reformas: Con el tiempo, puedes realizar reformas y modificaciones en el diseño o los acabados de tu piscina de obra para actualizarla o adaptarla a nuevos gustos.

Resistencia a movimientos del terreno: Una estructura de hormigón bien cimentada es más resistente a posibles movimientos del terreno que podrían afectar a otros tipos de piscinas.