Disfrute durante todo el año: La climatización permite utilizar la piscina independientemente de la temperatura exterior, incluso en los meses más fríos. En España, esto significa poder disfrutar de la piscina durante una temporada mucho más larga, desde la primavera hasta bien entrado el otoño, e incluso durante todo el año en algunas regiones.
Mayor flexibilidad: No dependerás del clima para disfrutar de un baño o hacer ejercicio en tu piscina.

Atractivo adicional: Una piscina climatizada puede ser un atractivo adicional para tu vivienda en caso de venta o alquiler, aumentando su valor percibido.

Reducción de la evaporación: Mantener una temperatura más estable del agua, especialmente si se combina con un cobertor, puede ayudar a reducir la evaporación, lo que se traduce en un menor consumo de agua y de productos químicos para mantener el equilibrio del agua.
Menor riesgo de congelación: En zonas frías, la climatización ayuda a prevenir la congelación del agua y los daños que esto puede ocasionar en la estructura de la piscina y las tuberías.